Alcachofas borrachas de Amor

-1 lata de corazones de alcachofas hervidos (8 ó 10 unidades).

– 1 bote de pimientos rojos asados partidos a tiras.

– 2 calabacines pequeños partidos en dados.

– 2 latas de atún al natural.

– 1 diente de ajo hermoso majado con: pizca de cominos en grano, perejil, canela molida y sal.

– 10 almendras crudas con piel.

– 25grs. de cacahuetes tostados sin piel.

– 1 copita de vermú rojo.

– pizca de orégano.

– 1/2 cucharadita, tamaño café, de curry.

– 1/2 cucharadita, tamaño café, de pimentón picante.

– orégano.

– sal yodada de las salinas del Cabo de Gata (Almería).

– aceite de oliva.

ELABORACIÓN

Cubrimos discretamente el culo de nuestra cazuela preferida con aceite de oliva. El fuego está fuerte. Mientras la calienta, preparamos uno de los majados. Empezamos por el de ajo, perejil, cominos en grano, canela molida y la sal de El Cabo de Gata (no olvidemos la sal, pues de lo contrario, los ingredientes del almirez -o mortero- saldría propulsados al espacio esterior de nuestra cocina, o quién sabe, si incluso a la casa de ese vecino que acaba de trasladarse y aún no sabemos de qué pie cojea o cojeará).

Bien. Una vez que hacemos el majado del ajo, lo dejamos en un cuenquito esperando su turno. Como el aceite ya estará óptimo, le achuchamos el calabacín partido en dados. Damos unas vueltas. Bajamos el fuego al mínimo. Es el momento de preparar el segundo majado: juntamos en el mismo mortero -o almirez- las almendras y los cacahuetes. Paramos de majar cuando se han convertido en una especie de polvo-pasta. Alternaremos sendos brazos para elaborar el majado. Haremos series de 8 con cada brazo. (no sería ni justo ni estético conseguir un brazo torneado y el otro modelo natillas gelatinosas).

Reservados el majado de los frutos secos. Vertemos el majado del ajo en la cacerola. Antes hemos subido el fuego. Removemos con mimo. Lo volvemos a bajar. Añadimos el pimiento asado en tiras. Damos unas vueltas con algo más que mimo. Le damos un calentón de medio minuto (lo siento, pero guisar y «amar» es lo que tiene). Acto seguido, adjuntamos el majado de los frutos secos. El fuego está a medio gas. Meneamos los ingredientes.

Es el momento de juntarles el atún. El fuego está alto. Casi salteamos. Entonces es cuando aparecen en escena, es decir, en la perola, las alcachofas, bien lavadas y escurridas. Le damos vida a fuego fuerte minuto y pico, según lo vayan pidiendo los componentes de las Alcachofas borrachas de Amor. Es importante escucharlos. Es importante verlos y olerlos. Los ingredientes hablan, cantan, chillan, ríen y alborotan. Alborotan muchísimo. Aprende a escucharlos y a descifrarlos, pues hablan con los 5 sentidos.

Continuando con nuestra obra culinaria, vertemos el vermú. El fuego está fuerte. Todos tienen mucho calor. Los vapores etílicos se abren camino hacia el techo de nuestro laboratorio. Este momento también es importante. Quiere decir que hemos de bajar el fuego, tapar y dejar que todos los ingredientes se embriaguen durante unos minutos. Ayudamos a esta embriaguez con el curry y el pimentón picante.

Dos minutos después, corregimos de sal, si fuere necesario (futuro de subjuntivo).

Espolvorear orégano por encima. Servir acompañado de arroz basmati hervido, pan de centeno y vino tinto reserva del 2006 (a ser posible con uva garnacha y tempranillo).

En el comer y en el amar todo es empezar. ¡Salud, para disfrutar de la Vida!

PROPIEDADES NUTRICIONALES

ALCACHOFAS: es uno de esos pocos alimentos hepatoprotectores, es decir, protegen y reparan, si ya estuviera dañado, el hígado; lo regeneran. Contiene un fitonutriente llamado cinarina, que, reduce activamente el colesterol malo de la sangre. También reduce considerablemente los temidos triglicéridos. Otro de sus fitonutrientes es la inulina, que, además de acabar con el estreñimiento, incluido el más pertinaz e impertinente, incrementa la producción de las bifidobacterias, presentes en las heces y fundamentales para el trabajo de expulsión, con lo que nuestras deliciosas alcachofas, se lo ponen bien difícil al denostado cáncer de colon y incluso al de piel (gracias a la silimarina).

El frío es la época óptima de las alcachofas. Pero gracias a la ciencia del envasado, las tenemos todo el año en el mercado.

Especialmente recomendables para estas fiestas, en las que el hígado hará sin duda horas extras.

Del resto de los ingredientes hablaremos en otra receta, no sin antes recordaros las bondades para el amor-eros del curry, ajo, pimentón.